Si bien vacunarse es algo voluntario en la sociedad española, en ciertos casos podría darse el supuesto en el que nos veamos forzados a vacunarnos por razones sanitarias de urgencia o necesidad que, fundamentalmente, suelen darse en caso de epidemias.
¿Puede el Estado obligarme a recibir la vacuna?
Vacunarse en España es voluntario como regla general, sin embargo, puede imponerse de manera forzosa cuando exista un riesgo para la salud pública.
En este sentido, la normativa vigente establece que las autoridades sanitarias de las Administraciones Públicas podrán adoptar las medidas que consideren oportunas para proteger la salud pública y prevenir su pérdida o deterioro siempre y cuando esas medidas se justifiquen en razones sanitarias de necesidad o urgencia.
En resumen, cuando exista un riesgo colectivo para la salud pública, se podría decir que la vacuna puede llegar a imponerse lícitamente para evitar el peligro para la salud de la población, siendo los Juzgados de lo Contencioso-Administrativo a quien corresponde autorizar o ratificar judicialmente las medidas que las autoridades sanitarias consideren urgentes y necesarias para la salud pública e impliquen privación o restricción de la libertad o de otro derecho fundamental tal y como se establece en el artículo 8.6 de la Ley de Jurisdicción Contencioso-Administrativa.
¿Existe alguna excepción por la que pueda decidir si vacunarme o no?
La Constitución española establece que “toda persona tiene derecho a la vida y a la integridad física y moral, sin que, en ningún caso, pueda ser sometida a tortura ni a penas o tratos degradantes”.
Sin embargo, no se incluye el derecho a la muerte. No podríamos negarnos a una orden judicial que estableciera como obligatoria la vacuna frente a la COVID-19.
Todo ello tiene su fundamento en el bien jurídico protegido que no es únicamente la salud del propio individuo, sino también la del resto de la sociedad. Se trata de la salvaguarda de un bien común, la salud pública, al tratarse de un virus muy infeccioso y que se propaga rápidamente.
¿Existe algún precedente en España donde se haya impuesto alguna vacuna de manera forzada?
En España –por regla general- las vacunas no son obligatorias pero sí altamente recomendadas por el Sistema Nacional de Salud. Actualmente contamos con un calendario de vacunas, en vigor desde el 1 de enero de 2019, en el que se incluyen 14 enfermedades infecciosas.
Si bien es cierto que en situaciones normales no se puede imponer de forma obligatoria ninguna vacuna, en 2010 –tras un brote de sarampión en la provincia de Granada- existe un precedente donde se acordó autorizar la vacunación forzosa de treinta y cinco niños del Colegio Público Gómez Moreno (aun existiendo negativa por parte de sus padres) con el objetivo de erradicar su transmisión, preservando así la salud pública.
Por tanto, teniendo en cuenta todo lo anterior, se puede imponer como obligatoria la vacuna en aras de preservar la integridad de la salud pública mundial en caso de ser urgente y necesario.